Compartimos con la comunidad educativa la indignación que nos embarga por haber realizado un gran esfuerzo, en forma conjunta con tod@s l@s que trabajan por la educación pública en nuestro distrito, para que hoy el Jardín de Infantes N°919 se haya conformado como un nuevo establecimiento educativo, que cuenta con alumnos, equipo directivo, personal docente y auxiliar, pero no puede iniciar sus actividades debido a que la provincia no envía el mobiliario correspondiente.
Este Jardín fue proyectado para una comunidad que no tenía garantizado el derecho a la educación de sus niños. Las distancias y la falta de vacantes son preocupaciones que compartimos y es responsabilidad de todos nosotros resolverlas. En este caso, se ha podido rescatar del olvido una construcción ya aprobada y con sus respectivos fondos destinados en 2015. La presión ejercida ante las autoridades provinciales desde todos los sectores, hizo que se construyera el edificio, se culminara y se designara a todo el personal necesario. Hoy es una institución educativa completa pero sin mobiliario. Suena ridículo pero es la realidad.
Todos los días estamos elevando el pedido respectivo y reforzándolo con llamados telefónicos que, en en algunos casos no son atendidos y en otros obtenemos evasivas como respuesta. Los correos son ignorados inclusive los que hacemos llegar a otras oficinas, para que al menos les avisen a los responsables que hay un jardincito en La Costa que tiene a sus chicos en la calle porque le faltan las sillas y las mesas, pero nadie acusa recibo.
No comprendemos cómo se explica que un flamante jardín no pueda inaugurarse porque le falta el mobiliario. Nosotros hablamos de derechos y peleamos para defenderlos. Cómo puede ser esto? No nos entra en la cabeza.
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